Lo llamaron "genio", "revolucionario", "Rey del Pop", y de muchas otras formas, y, quizá, estos adjetivos los tenía merecidos, pero...¿cómo olvidar que era un PEDERASTA? Nuestra sociedad, nuestra cultura, la "era del espectáculo" lo puso en un lugar alto: esta cultura le dio el sí permisivo. Me tiene sin cuidado que un artista se incline por las drogas, se convierta en un alcohólico, o que sea un adúltero, porque esas son decisiones que los toma un adulto, pero...¡NO METERSE CON LOS NIÑOS! POR ESTO ES QUE SU FIGURA ME PRODUJO UN GRAN RECHAZO POR SU PERSONA: ENFÁTICAMENTE DIGO ¡NO! A LOS PEDERASTAS. ¡UN GRAN NO A LOS PEDERASTAS QUE NO RESPETAN --NI RESPETARON-- LA PUREZA Y LA INTEGRIDAD FÍSICA Y MORAL DE CUALQUIER NIÑO!!!
La "sociedad del espectáculo" --como la tildó Guy Debord, ya en los lejanos 60-- llora a este músico que les entretuvo y lo seguirá haciendo. Su música sonaba muy bien pero su moral olía a podrido. (Sólo los débiles de memoria, o lo no informados, olvidan --y olvidarán más, ahora-- que este "genio pop" tuvo que desembolsar muchos millones de dólares para acallar las voces de los padres de los niños de los que abusó, y para costear los abultados honorarios de la legión de abogados que lo defendieron por graves denuncias por pederastía). Es esta misma sociedad del espectáculo --que el gran Bertolt Brecht cuestionaba y a la que interpelaba ante su facilidad para la fascinación, para el bobo encantamiento que reduce el lugar del análisis en pos de la seducción del "elegido"-- lo llama "artista integral" y "ejemplo". ¿De qué puede ser ejemplo este monstruo inmoral, este abusador de menores?
LA CRUDEZA DE ESTA NOTA, AQUÍ, PUEDE MOLESTAR, PERO LO DIGO DE MANERA ABIERTA: ¡NO A ESTE ARTISTA PEDERASTA, ABORRECIBLE COMO TAL!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario